La noche del 18 de julio de 2025 en el Poble Espanyol de Barcelona fue testigo de uno de los conciertos más honestos y cautivadores de este verano musical. Rag’n’Bone Man, el artista británico de voz inconfundible y carisma humilde, regresó a la ciudad tras siete años sin pisar sus escenarios. Lo hizo en el marco del Alma Occident Festival, un ciclo que ha revitalizado las veladas estivales en Barcelona reuniendo a grandes figuras internacionales

Desde su aparición en el escenario principal a las 22:00h, Rory Graham —alias Rag’n’Bone Man— se mostró visiblemente emocionado y agradecido, confesando cierta inquietud por la acogida tras una larga ausencia. Pero el fervor del público local, expectante bajo las luces del Pueblo Espanyol, disipó cualquier duda: la conexión estaba servida desde el primer verso







El repertorio equilibró clásicos coreados y temas recientes, arrancando con fuerza gracias a piezas como “Skin”, “Lovers in a Past Life” y “Hideaway”. Sin apenas alardes escénicos, la puesta en escena combinó visuales inteligentes —con letras y animaciones proyectadas— que animaron a los asistentes a cantar y sumergirse en esa atmósfera íntima tan característica del festival
Las interpretaciones de What Do You Believe In? y Ghosts reservaron momentos de emoción contenida y respeto casi reverencial, mientras que temas más rítmicos como All You Ever Wanted levantaron a la audiencia y pusieron por un momento a bailar a más de uno. La banda y los coristas aportaron texturas sin eclipsar nunca el protagonismo de una voz poderosa y genuina.










La emoción fue creciendo tema a tema, especialmente cuando sonó Human, el momentazo de la noche. La gente la coreó de principio a fin, creando un ambiente mágico que pocas veces se vive en un festival al aire libre. El cierre, con Giant y un regalo especial a un fan, puso el broche final a una noche para recordar.
El Alma Festival ha vuelto a demostrar por qué es una cita imprescindible del verano en Barcelona, y Rag’n’Bone Man nos recordó algo básico: cuando hay canciones y sentimiento, el público conecta de verdad. Simplemente inolvidable.














Gracias al Alma Festival por seguir regalando noches mágicas y a Rag’n’Bone Man por brindarnos tanta emoción y verdad en cada canción.
«Pelos de punta». GRACIAS.
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